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Su madre, la doctora Shyamala Gopalan Harris, ahorró durante años para comprar una casa para su familia, y finalmente logró ese sueño cuando Kamala era una adolescente. Su madre también le enseñó el valor del trabajo duro, llevando a Kamala a su laboratorio de investigación sobre el cáncer de mama y mostrándole cómo limpiar tubos de ensayo cuando era niña. Kamala trabajó en un empleo de verano en un McDonald’s mientras asistía a la Universidad de Howard para obtener su título universitario. A una edad temprana, Kamala decidió que quería seguir una carrera en la que pudiese luchar por las personas más vulnerables, después de que una amiga cercana le confiara que estaba sufriendo abusos en casa.
Kamala se convirtió en fiscal y se especializó en casos de abuso sexual infantil. Después de ganar las elecciones como fiscal de distrito, se enfrentó a problemas como la violencia doméstica y la violencia con armas de fuego, aumentó la tasa de condenas para poner a los violadores y asesinos tras las rejas, y creó programas innovadores para asegurarse de que los delincuentes no violentos de bajo nivel no volvieran a cometer delitos y pudieran encarrilar nuevamente sus vidas.
Como fiscal general de un estado fronterizo y jefa de las fuerzas del orden público del estado más grande de la nación, Kamala tomó medidas enérgicas contra las organizaciones criminales transnacionales que trafican drogas y migrantes vulnerables a través de la frontera. Se enfrentó a los grandes bancos y los hizo rendir cuentas por aprovecharse de los propietarios de viviendas, logrando obtener $20.000 millones de dólares para los estadounidenses que estaban a punto de perder sus hogares durante la Gran Recesión. Y persiguió a las universidades depredadoras con fines de lucro, logrando un acuerdo de $1.1 mil millones para estudiantes y veteranos que fueron estafados. Hizo que las empresas contaminantes pagaran más de $1.000 millones de dólares para limpiar las comunidades contaminadas ilegalmente y aseguró, para la gente, más de $230 millones de dólares de las grandes farmacéuticas por sus prácticas engañosas y peligrosas.
Como senadora de los Estados Unidos, Kamala defendió la legislación para aumentar los salarios y reducir los costos para las familias: en atención médica, vivienda, cuidado infantil, universidad y más. Creó un nuevo programa que invirtió miles de millones de dólares para ampliar el acceso al capital para pequeños negocios y empresarios en comunidades marginadas. Luchó por la libertad de respirar aire limpio y tomar agua limpia, la libertad de votar y las políticas con sentido común para mantener seguras a nuestras comunidades. Lideró el impulso para invertir en la infraestructura de nuestra nación, presentando legislación sobre el agua limpia, las tuberías de plomo y la resiliencia durante las sequías y los incendios forestales, todo lo cual luego se convirtió en ley como parte de la Ley Bipartidista de Infraestructura.
Kamala sirvió en el Comité Selecto de Inteligencia del Senado, trabajando con senadores de ambos partidos para proteger nuestra seguridad nacional. E interrogó a los nominados de Donald Trump, como Jeff Sessions y Brett Kavanaugh, para obtener respuestas para los estadounidenses.
Como vicepresidenta, Kamala está liderando la lucha para reducir los costos de la atención médica. Ella emitió el voto decisivo para reducir los precios de los medicamentos y limitar los precios de la insulina para nuestros adultos mayores y está trabajando para expandir esa política para todos los estadounidenses. Supervisa la primera Oficina de Prevención de la Violencia con Armas de Fuego de la Casa Blanca, trabajando incansablemente para abordar la epidemia de violencia con armas de fuego, y promueve los intereses de los Estados Unidos en el escenario mundial, enfrentándose a líderes autoritarios y dictadores en el extranjero, mientras fortalece a la OTAN.
Desde la anulación de Roe v. Wade, Kamala ha liderado la lucha para restaurar la libertad reproductiva, recorriendo el país para defender el acceso de las mujeres a la atención médica, apoyando a los proveedores de atención médica y arrojando luz sobre la crisis. Es la primera vicepresidenta en funciones que visita una clínica de salud reproductiva.
En 2013, su mejor amiga le organizó una cita a ciegas con Douglas Emhoff. Como Doug suele decir, fue amor a primera vista. Al año siguiente, se casaron. Su numerosa familia incluye a sus hijos, Ella y Cole. Los domingos, los puede encontrar a todos juntos en la cocina preparando la cena familiar (Doug elige la música).
Kamala Harris cree en un futuro en el que todas las personas tengan la oportunidad no solo de sobrevivir, sino de salir adelante. Sabe que los precios siguen siendo demasiado altos y, como presidenta, su principal prioridad económica será seguir bajando los costos. Perseguirá a las compañías de seguros de salud codiciosas, hará que las grandes farmacéuticas reduzcan los precios de sus medicamentos, se enfrentará a los propietarios corporativos para limitar los alquileres injustos y responsabilizará a las corporaciones por el aumento abusivo de precios que aumenta los precios para las familias estadounidenses. Ella otorgará a los compradores de vivienda por primera vez $25.000 para ayudar con el pago inicial de una nueva casa, para que, al igual que su madre, más estadounidenses finalmente puedan lograr el sueño de tener una casa para sus familias.
Fortalecerá el Seguro Social y el Medicare para que las personas puedan obtener los beneficios que se han ganado, asegurando que las personas que han trabajado toda su vida puedan jubilarse con dignidad. También reducirá los impuestos para las familias de clase media y hará que los ricos paguen su parte justa, de modo que ninguna familia que gane menos de $400.000 dólares al año tenga que pagar un centavo más en impuestos.
Kamala cree que las decisiones sobre el cuidado de salud pertenecen a las mujeres y a sus médicos, no a los políticos ni al gobierno. Como presidenta, continuará liderando la lucha para restaurar la libertad reproductiva y proteger el acceso de las mujeres a la atención médica, con una nueva ley que garantice el derecho al aborto en todo el país.
Kamala trabajará con líderes de ambos partidos para traer soluciones reales a la mesa, con el fin de proteger nuestra seguridad nacional y defender nuestros valores como una nación de inmigrantes. Y revivirá y aprobará el tipo de proyecto de ley fuerte y bipartidista de control fronterizo que Donald Trump bloqueó.
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